ONA, con sucursales en Italia, Francia y Portugal, cuenta con una plantilla de 130 empleados, y más del 20% de ellos se dedica a la investigación y desarrollo. La empresa ha logrado destacarse gracias a su capacidad para fabricar máquinas a medida y de gran envergadura.
La electroerosión es un proceso mediante el cual se arranca material utilizando descargas eléctricas controladas en lugar de herramientas mecánicas convencionales. Este método permite obtener resultados de alta precisión y calidad en materiales duros. La experiencia de ONA en esta área ha posicionado a la empresa como un referente en la Unión Europea.
El proyecto con Tesla para su megafactoría de vehículos eléctricos en Texas se centra en el sector del molde. Aunque los detalles son confidenciales, se sabe que implica la inyección de aluminio en los chasis de los vehículos para lograr una producción eficiente. La participación de ONA en esta operación ha sido recibida como una excelente noticia, ya que demuestra el reconocimiento de su experiencia y capacidad tecnológica.
Además de la colaboración con Tesla, ONA ha reforzado su posición exportadora, con más del 80% de sus ventas destinadas al mercado internacional. Esta cifra destaca la relevancia de la empresa en el ámbito global y su capacidad para competir con éxito en diferentes mercados.
Aunque ONA se ha centrado tradicionalmente en la fabricación de máquinas para turbinas, en los últimos años ha diversificado su negocio para adaptarse a los cambios del mercado. La electroerosión en componentes de turbinas ha ganado terreno y ahora representa casi la mitad de la facturación de la empresa. Este enfoque estratégico ha permitido a ONA mantenerse a la vanguardia de la industria y capitalizar las oportunidades emergentes.
En cuanto a las expectativas para este año, ONA se muestra optimista. A pesar de la incertidumbre geopolítica y geoeconómica, la empresa ve oportunidades en las nuevas tecnologías aplicadas a las turbinas y la movilidad sostenible. Recientemente, ONA ha recibido un gran pedido de un cliente italiano, lo que respalda las perspectivas positivas para el año en curso.
No obstante, ONA también reconoce la necesidad de adaptarse rápidamente a los cambios del mercado. Los planes estratégicos ahora se ajustan mensualmente para garantizar la flexibilidad y la capacidad de respuesta a las demandas cambiantes.
Aunque la empresa se encuentra en una posición tecnológicamente avanzada, ONA sigue de cerca los debates actuales sobre la Inteligencia Artificial (IA). La empresa está involucrada en proyectos de IA que tienen como objetivo mejorar el rendimiento de sus máquinas y se muestra positiva sobre el potencial de la IA para impulsar avances significativos en el futuro.
En resumen, ONA se destaca como uno de los principales fabricantes europeos de máquinas de electroerosión. Su participación en el proyecto de Tesla en Texas y su enfoque en la diversificación del negocio le han permitido mantenerse competitiva y aprovechar nuevas oportunidades. Con una perspectiva optimista para el año en curso, ONA se mantiene atenta a los cambios del mercado y se posiciona como una empresa líder en tecnología y fabricación.